Los cristales son una gran fuente de energía para sus portadores y así como nos regalan sus virtudes nos protegen absorbiendo las bajas vibraciones que hay a nuestro alrededor. Es importante tomar en cuenta que los cristales se cargan de nuestra propia energía tanto positiva como negativa por eso debemos limpiarlos y cargarlos, existen diferentes métodos de limpieza como la técnica de la fumigación con salvia, palo santo, cedro y yerba santo. También se puede realizar purificación con el sonido cómo campanas, un cuenco de cristal o del Himalaya. Se pueden cargar con otros cristales como la selenita.
Limpieza con planta sagrada: Prendemos nuestra planta sagrada (Salvia,Yerba Santa, Cedro o Palo Santo) con la ayuda de una vela, se utiliza con movimientos circulares en contra de la aguja del reloj y con intenciones de bienestar, armonía y protección.
Purificación con la luz: Prender una vela y poner el cristal frente de la llama, visualizar que el fuego que está alrededor de tu cristal elimina todas las energías negativas que ha absorbido.
Recargar con la luna: Durante la luna llena colocar nuestros cristales en exposición a su reflejo, esto nos permitirá recargarlos con su energía cíclica.
Limpieza con sonido: Introducir tus cristales dentro de un cuenco de cristal o del himalaya (asegurate de colocar una tela entre tu cuenco y el cristal) y tocar con intención de limpieza. El sonido tiene un fuerte poder de purificación.